Buscar ayuda para lograr un embarazo

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Aproximadamente un 10-15 % de las personas que quieren tener hijos han sufrido infertilidad en algún momento. Los motivos de esta infertilidad pueden estar en el hombre, en la mujer o en ambos, y a veces no tienen explicación. Esta infertilidad no deseada puede depender de factores que se escapan del control de las personas, como alteraciones innatas o enfermedades. Los hábitos de vida pueden repercutir también en las posibilidades de quedarse embarazada. Los profesionales sanitarios ofrecen investigación y tratamiento a parejas no fértiles y también a mujeres solteras. En aproximadamente 1 de cada 4 casos se logra concebir mediante inseminación artificial (por intento). Muchas veces es necesario repetir los tratamientos para poder conseguir el tan ansiado embarazo. Cuanto más mayor es la mujer, menos posibilidades de embarazo existen. La mayoría de clínicas establecen un límite de edad (en torno a los 40 años) y a veces también un límite de peso, para aplicar tratamientos de fertilidad. Los estudios muestran que tanto hombres como mujeres son demasiado optimistas sobre sus posibilidades de tener hijos gracias a las tecnologías de reproducción asistida.

Congelar los óvulos, fecundados o no, es uno de los métodos de tratamiento más innovadores en lo que a tecnologías reproductiva asistida se refiere. Esto significa que una puede posponer el embarazo por razones médicas o cualquier otra razón, por ejemplo.

Con la ayuda de «técnicas de vitrificación», los óvulos no fecundados pueden congelarse para su uso posterior. Los óvulos se congelan rápidamente y se descongelan lentamente. Se consigue fecundar los óvulos mediante lo que se conoce como microinyección de espermatozoides.

Para poder congelar óvulos no fertilizados primero se comprueban las reservas existentes de óvulos de la mujer por medio de una ecografía y una muestra sanguínea. Junto con la edad y otros requisitos médicos se determinará si la persona es adecuada o no para el tratamiento.

¿Cuál es el porcentaje de éxito? Congelar los óvulos es una tecnología relativamente nueva. Los estudios que ya se han llevado a cabo muestran que las posibilidades de conseguir un embarazo son las mismas que mediante inseminación artificial. Básicamente, la diferencia la encontramos en la edad de los óvulos una vez estos se congelan.

¿Quién puede congelar los óvulos? En Suecia todavía no hay una normativa al respecto. Las clínicas que realizan estos tratamientos tienen sus propias normativas y recomendaciones. La edad límite para poder congelar los óvulos es 40-45 años para que el óvulo fertilizado se pueda volver a implantar en el útero.

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