Tanto la salud física como la psicológica pueden repercutir en la fertilidad y en el embarazo de muchas formas. En el caso de personas con enfermedades crónicas como son la diabetes, hipertensión, epilepsia y desórdenes tiroideos, un plan de vida reproductiva es muy importante, puesto que tanto la enfermedad como su tratamiento pueden afectar a la fertilidad y al embarazo.
Las sustancias químicas, radiaciones y otros factores medioambientales pueden también repercutir negativamente en la fertilidad, aumentar el riesgo de aborto y dificultar el desarrollo del feto. Los solventes orgánicos, metales pesados, pesticidas o diferentes formas de radiación pueden desembocar en abortos espontáneos o aumentar el riesgo de problemas durante el parto. A aquellas mujeres embarazadas o que buscan quedarse embarazadas se les desaconseja trabajar con o realizar actividades lúdicas que impliquen una exposición a solventes orgánicos. La Autoridad Sueca para el Entorno Laboral ha establecido un límite de las emisiones de metales pesados, como el cadmio y el plomo, determinadas radiaciones (luz ultravioleta y rayos X) y ciertos químicos industriales, entre otras cosas, por el riesgo de sufrir anomalías congénitas.
Además, determinados medicamentos pueden tener efectos nocivos para el desarrollo del feto. Algunos analgésicos (AINES) que se usan para combatir los dolores menstruales, aumentan el riesgo de aborto y de defectos cardíacos congénitos.
Las drogas de mejora del rendimiento pueden causar trastornos en el ciclo menstrual, deteriorar el funcionamiento de los espermatozoides y desencadenar en una disfunción eréctil. Los efectos de estas drogas pueden permanecer en el cuerpo durante varios años, sobre todo en las mujeres, ya que los riesgos de infertilidad a largo plazo son mucho mayores que en los hombres.
Prestad atención a las sustancias a las que estáis expuestas y que pueden afectar negativamente a un embarazo. Consultad a vuestro médico o matrona en caso de dudas sobre la medicación que estáis tomando. Nunca dejéis de tomar los medicamentos que os han recetado sin consultarlo antes con vuestro médico.
Para conocer más acerca de sustancias químicas y factores medioambientales que pueden afectar tanto a la fertilidad como al desarrollo del feto, visitad el siguiente enlace: arbetsmiljöverket.se